La espera de un bebé es un período de fuertes expectativas, ilusiones compartidas, grandes ansiedades y también, de grandes decisiones. Algunas de ellas están vinculadas directamente con el futuro del bebé, como es la elección del nombre que siempre lo acompañará. Otras, como la elección de la maternidad y los médicos- apuntan a contar con el más alto nivel profesional y asistencial en el momento del parto.
Pero ahora, hay una decisión mucho más importante y trascendental para los padres la posibilidad de resguardar para su hijo un tesoro que podría protegerlo ante numerosas enfermedades y que de otra manera perdería el mismo día de su nacimiento. Algo que hoy es posible gracias a un revolucionario avance tecnológico como es la recuperación y preservación de células madre de la sangre del cordón umbilical que habitualmente son descartadas luego del parto.
Aprovechando la oportunidad única e irrepetible que brinda el parto, los padres pueden decidir la recuperación y conservación de las Células Madre “Stem Cells”, las cuales se encuentran en la sangre contenida en el cordón umbilical del bebé.
Estas células –similares a las que se encuentran en la médula ósea- tienen una compatibilidad genética exacta con el bebé, ya que fueron producidas por él mismo. En el futuro podrían ayudarlo a combatir graves enfermedades que puedan amenazar su salud y su vida, y hasta la de otros miembros de la familia, según el grado de compatibilidad que exista entre ellos y las células preservadas.
La decisión de recuperar y conservar las células madre de la sangre remanente en el cordón umbilical luego del parto, brindará a los padres la tranquilidad y la seguridad de saber que su hijo podrá utilizarlas en el momento que las necesite, para su beneficio o para el de algún otro integrante de tu familia..